lunes, 16 de febrero de 2009

LA CRISIS NUESTRA DE CADA DÍA


C
ompra usted marcas blancas en el súper, no se fía de los bancos, piensa en meter los ahorros bajo el colchón, de pedir préstamos ni hablar, hace equilibrios para cuadrar las cuentas y llegar a fin de mes... En efecto, es usted un damnificado más de la coyuntura de crisis mundial.

Si por el contrario es usted un banquero de alguna acreditada entidad financiera que, ¡oh sorpresa!, tiene un agujero en sus activos producido por una mala planificación, no se preocupe. Usted no se verá afectado por los embates de la mala situación económica puesto que para arreglar el desaguisado ya están los políticos neoliberales intervencionistas (sí, sí, créanlo, neocon comunistas en nuestro siglo XXI). Contradictoramente real. Como la vida misma.

Ante el obsceno caudal de dinero inyectado en las “maltrechas” cuentas de nuestros banqueros, a los ciudadanos de a pie les queda pelear por mejorar su calidad de vida. Una de las principales preocupaciones de los españoles (y por ende, de los albaceteños), es el paro. Más de 10.000 desempleados se cuenta en nuestra ciudad, situación que se debe paliar con medidas efectivas.

Para contrarrestar los efectos de la crisis sobre la situación laboral de los albaceteños, el papel de órganos como la Mesa Local de Empleo se antoja esencial. La concejala del ídem propugnó ante el plenario la puesta en marcha de una serie de acciones destinadas a mejorar la inserción laboral. Bravo, bravo, pero... Siempre hay un pero. Usurpando y transformando un tema de Sinatra, lo peor está por llegar. Lo ha dicho la propia alcaldesa. Por muchas ideas que surjan y que a priori parezcan buenas para insuflar aire a un alicaído mercado laboral, hace falta la implicación de los sectores empresariales que deben tener un compromiso de contratación de esos futuribles empleados. Pero los empresarios necesitan mayor seguridad financiera, sino no se atreven a contratar. Entre pitos y flautas, una pescadilla que se muerde la cola y que seguro, también estará preocupada por la crisis.

2 comentarios:

Alfonso Piñeiro dijo...

Es que a la pescadilla, el día menos pensado le dicen que o tiene 20 renacuajos por día o que ella verá, que no están los tiempos para hacer tonterías, y que el tiempo que pierde entre pirueta y pirueta lo debe recuperar después "incubando" crías. Te lo dice uno que no es banquero, ni contradictoriamente real.

Por cierto, ¿cómo llamar a los neocon comunistas? ¿Neokom? Me apropio el nombre y me lo llevo a mi blog. ¡Ah, se siente, haber llegado antes! (Bueno, se comparte, hale).

Tienes una buena pieza en La Verdad acerca de los parados de Albacete. Que le aproveche mucho a su voecencia de vosted.

Miguel A. dijo...

Un día un buen amigo (periodista, vasco y del Athletic para más señas) me dio un buen consejo. "¡Nunca trabajes para Vocento!". A decir verdad, no entendí en ese momento por qué. Luego, cuando Vocento me llamó para formar parte de la plantilla de La Voz de Cádiz, me di cuenta de su recelo contra los vocentistas. Preferí seguir en una empresa que me explotaba, pero en el que me me daban mi sitio y se me respetaba.
Sobre pescadillas, ¿qué te puede decir un gaditano? Por cierto, me piro a Cádiz el viernes para disfrutar de los Carnavales. Me tomaré un fino de mi tierra y algo de pescaíto a su salud.