sábado, 31 de octubre de 2015

La muerte y el pecado

Se7en (1995). Dirigida por David Fincher.




jueves, 29 de octubre de 2015

Toma la independencia y corre...

Si yo fuera catalán y mi gobierno me dijera que quiere independizarse, yo pensaría en los golfos apandadores...





miércoles, 28 de octubre de 2015

Cacho carne

Es sencillo. No comáis demasiada carne (roja o blanca) porque puede ser perjudicial para la salud de algunos humanos. Lo mismo que si te bebes diez litros de agua del tirón, te mueres. Y ya...

Cacho carne...



domingo, 25 de octubre de 2015

El cante por fatigas de Rancapino

Mi cante es un cante por fatigas...
Rancapino

Los pies descalzos y los catarros constantes. El soniquete reverberaba en la garganta de Alonsito que ya empezaba a darse cuenta a temprana edad, cuál sería su sustento. A los siete años, Alonsito, Alonso Núñez Rancapino dejó el colegio y se echó a la calle a cantar. Había que comer en esa España en blanco y negro y si uno tenía algo con lo que valerse, había que explotarlo. Rancapino y su familia comieron de la voz rota del cante flamenco. Desde que era chiquitito. Qué buena escuela del flamenco esa. Las puñalás de la vida y la necesidad fueron sus maestras y el fino oído del chiclanero culminó su formación como cantaor escuchando a los más grandes: Aurelio Sellés, Chano Lobato, Caracol... Estuvo con los más grandes y recuerda con especial cariño a Fernanda y Bernarda de Utrera, dos gigantes del cante jondo.


Alonso ya no canta mucho. Su hijo recoge el testigo separándose del estilo paterno para crear el suyo propio, personal e intransferible. Pero a Rancapino padre le hacen los ojos chiribitas cuando habla de aquellos años de gloria junto a Camarón, de tablao en tablao, de ciudad en ciudad, de avión en avión, llevando por esos mundos de Dios, los caminos del cante más puro ese, que unos pies descalzos y el hambre, le hicieron descubrir cuando era niño.

Hoy Alonso canta para los amigos. Unas alegrías, una soleá inacabada o una bulería requebrada en su voz arenosa y sabes que ante ti está un genio del flamenco.



miércoles, 21 de octubre de 2015

Hoy es el futuro

Hoy es 21 de octubre de 2015. El día del futuro en... Regreso al futuro.


(Foto: robertphoenix.com)

- Hey, Doc. No tenemos suficiente carretera para ir a 140. 
- ¿Carretera? A donde vamos, no necesitaremos carreteras.


Y esto amigos, es mítico...





lunes, 19 de octubre de 2015

La riá

Hace medio siglo las calles de Chiclana se inundaron de agua... y el agua trajo fango. Y tras la lluvia y el fango, la desolación. Pero tras ella, vino el trabajo y la superación del dolor y la tragedia. Hoy hace 50 años de la riá de Chiclana. Cincuenta años del nacimiento de otra Chiclana, para bien o para mal.





jueves, 15 de octubre de 2015

Los días de Legionaria

Días que, por muy extraño que nos parezca, son luminosos. Las noches de las putas también lo son, al menos para quienes hayan tenido la suerte de hablar con ellas (y aquí un servidor lo ha podido hacer mientras yo trabajaba... y ellas también). Pero la puta desvelada por Fernando Quiñones en el relato corto La Legionaria (a su vez surgido de Las mil noches de Hortensia Romero), suscita varios elementos para la reflexión que la compañía La Torrent escenificó con tino y primor en su paso por el Teatro Moderno.

(Foto: Paco López).
Legionaria es un señora digna. Lo demostró relatándonos una historia vibrante que fue de la risa a la amargura con la rapidez de una relación entre cliente y prostituta. Su dignidad, nada impostada, juega con los clichés del oficio más antiguo del mundo pero con una inusitada humanidad tanto en los momentos más jocosos como en aquellos en los que la vida de Hortensia se atenaza por los recuerdos más penosos. Al fin y al cabo, Montse Torrent (perfectamente parapetada tras la máscara de Legionaria), nos habla de la vida tal y como es. Pero no la vida de una puta, no. La vida de todos nosotros. En eso no hay diferencia. Quiñones nos regala un retrato vitalista que no por ello tiene que ser alegre en todo momento. Pero sí en el sentido de que la vida que es aprovechable al cien por cien y eso es lo que Hortensia Romero desgrana al público. Ella, para bien o para mal, ha vivido y con eso se queda. Eso es lo importante.

El retrato que Torrent hace de este personaje, tan cercano y a la vez, tan desconocido, es de relumbrón. Esas transiciones entre la comedia y el melodrama resumen a la perfección una obra que rayó a una altura increíble. Esa Legionaria se hace querer porque desde el minuto uno nos habla con franqueza y con absoluta naturalidad. Torrent ha rebuscado en el alma de la única protagonista de este relato quiñonesco y lo expone con toda su grandeza, con toda su crudeza. Y no, no lo hace yéndose a la parodia, que sería lo fácil y además es lo recurrente. El alma de la prostituta se abre para que veamos sus entresijos, sus deseos, sus frustraciones, sus alegrías y sus miedos, sus victorias y sus fracasos.

Puro grito de existencia, pura defensa de la igualdad, un monumento a la mujer en la prosa del escritor chiclanero y en la traslación que Montse Torrent hace de un personaje que es un auténtico tesoro. Su reverso luminoso sobre el escenario, lo ha hallado y ha querido hacernos ese maravilloso regalo. Días luminosos de un personaje absolutamente arrebatador.



lunes, 12 de octubre de 2015

Amor omnia vincit

(Foto: Zúh Malheur)

El amor todo lo vence. Incluso a quienes son incapaces de ver el valor de una propuesta que hoy en día parece no tener demasiados adeptos. Buena nota debería tomar Rajoy de estos chicos que durante un año se han acercado a los fundamentos de la cultura grecolatina mediante la maravillosa experiencia del teatro. Y lo han hecho de la mano de Plauto, de quienes han tomado la base de su Comedia de la olla o Aulularia para adaptarla en tiempo y forma y hacerla más accesible. Una experiencia total que ha demostrado la importancia de la enseñanza del teatro en la Secundaria. Cultura clásica + filosofía + teatro + música, cóctel que este Gobierno está cargándose a la vista de todos.

Pero dejemos a los políticos y hablemos de cosas importantes. La Aulularia que los alumnos del Taller de Teatro Grecolatino de Taetro montaron hay que verla desde una perspectiva global. Sería injusto interpretarla desde el mero plano de la dramaturgia, puesto que no es este un proyecto exclusivamente teatral. Es docencia, es pedagogía, es crear una comunidad de aprendizaje del sustento de nuestra civilización donde se ha hablado desde la gastronomía clásica (con inclusión de una receta recogida por Apicio), hasta de la música pasando por el matrimonio de aquellas civilizaciones. Si esta docena de chavales se han inmiscuido en esos temas y se les ha quedado algo de estas enseñanzas, Taetro ha triunfado.

Y victoria plena hubo en la plasmación escénica de todo el curso. Se presentía en las jornadas precedentes, pero el día de la actuación se cumplieron los augurios. Teatro lleno. Hasta la bandera. Vale que la entrada era gratuita, pero en Chiclana tenemos la experiencia de que incluso en espectáculos gratuitos, el patio de butacas no se completa. La Aulularia llenó patio y anfiteatro. Ahí es nada. No solo cumplieron con solvencia durante el taller y en el trascurso de su actuación, sino que encima son buenas propagandistas de la voz de este curso.

(Foto: Zúh Malheur).
Sobre el escenario mostraron varias caras: sobriedad cuando lo requerían los fragmentos que se respetaron del texto plautino y un absoluto desparpajo en los momentos más hilarantes de la acción. Curiosamente, el público agradeció más las aportaciones personales del elenco que lo escrito por el propio autor romano, cosa que da que pensar sobre la polivalencia de estos chicos, que consiguieron dar un ritmo endiablado a una obra que si no está bien gestionada puede caer en el tedio. Acierto también en la singularidad de las máscaras y los personajes creados por cada actor, con un acercamiento de cada uno de los roles a realidades conocidas por los chavales de su generación. El que haya un personaje afeminado u otro con habla bastante cercana al chiclanero que practicamos, hace más cercanos los personajes, más accesibles y posibilita que el teatro clásico llegue a un espectro de la población más amplio.

Interesante fue también la apuesta por dar mayor visibilidad a temas tan actuales como la violencia de género, la igualdad entre hombre y mujer, la avaricia o las nuevas relaciones sentimentales, asuntos latentes en el texto original pero no suficientemente explotados. Los directores del taller vieron las infinitas posibilidades del escrito plautino para potenciarlas y ofrecer nuevas visiones. Un plus que los chicos supieron explotar a las mil maravillas sobre las tablas del Moderno. Y otro elemento a sumar al éxito global fue la música. Tanto la viola y flauta (ejecutada por dos actrices del plantel en varios momentos de la actuación), como la canción final elevaron el conjunto y otorgaron un toque festivo a un final apoteósico que levantó al público de sus asientos. El equipo actoral se lanzó a cantar y se convirtió en el último logro de una función que ha dejado un sabor de boca espectacular... Tanto, que ya se escuchan voces de que es necesario repetir esta experiencia.

Si es que ya se sabe que el amor (al teatro) todo lo vence.



martes, 6 de octubre de 2015

Reservoir pics XXXVI