martes, 17 de abril de 2012

LA IMPORTANCIA DE LLAMARSE WERT

En tiempos donde la mentira y el miedo campan a sus anchas, sobre todo en los diccionarios que usan los políticos que nos gobiernan en los últimos años, hablar de "eficiencia del sistema" es como creer que Mourinho puede ser nombrado embajador de buena voluntad de Unicef... Una caca, vamos. La mentira persigue de nuevo a don Mariano Rajoy (y van...). En campaña, que es esa cosa en la que uno se dice lo guapo y lo bueno que es y las mentiras que va a llevar a cabo si sale elegido, dijo que no se tocaban sanidad y educación y ahí lo vemos... calladito y mandando a sus ministros hacer lo contrario. Todo sea en favor del sacrosanto déficit.

Dicen que se van a recortar más de 3.000 millones, aunque como es norma en este Gobierno, ni se confirma ni se descarta. Ya se verá. O sea, que eso significa menos profesores... y más paro. Aún no me explico la tibieza del sector del profesorado (conozco a muchos que no se han movido a pesar de que sus sueldos y puestos peligran). La reforma laboral va por buen camino. Eficiencia también dicen algunos, como el ínclito Marcial Marín (consejero de Educación de Castilla-La Mancha), en el sistema educativo a la hora de reordenar/eliminar una parte importante del Bachillerato. Ahora los institutos tendrán libertad de implantar el que más le guste. Y como el futuro está en las carreras de letras, pues todos apostarán por el Bachillerato de eso mismo... (ah no, que aquí todo el mundo cree que es en las ciencias donde está el futuro. Pues escogerán ciencias, oye). En la práctica, amigo lector, eso significa que alguna cosa se eliminará de un plumazo... pongamos... ¡letras! A la mierda las humanidades.

Wert pensando en la eficiencia.


Y lo que me hace más gracia es que quieren aplicar eficiencia a las ratios. Las ratios, amigos. Que algún sesudo ministro o consejero me explique cómo es mejor la eficiencia educacional si un solo profesor tiene a más alumnos. Mentiras y más mentiras. ¿Harán ahora algo aquellos profesores que no han asistido a ninguna manifestación, a ningún paro del sector, a la huelga general? ¿Qué dicen ahora esos sindicatos que aplaudían a Marcial Marín y a José Ignacio Wert?

Y hablando de ratios y eficiencia, me voy hoy en los informativos a un insigne doctor de la cosa educativa diciendo que en Japón en cada clase hay más de 40 alumnos y son los primeros del mundo en matemáticas. A ver amigo doctor, todos tus títulos y tus diplomas deberían alcanzarte para este pequeño ejercicio de lógica:

ESPAÑA: 47 MILLONES DE HABITANTES.
JAPÓN: 126 MILLONES DE HABITANTES (Y CASI LA MITAD DE SUPERFICIE).

No creo que deba explicar la relación a tan docto especialista.

Foto: abc.es

2 comentarios:

Manuel Meneses dijo...

Mi querido amigo Miguel, buen artículo sobre la desazón que tenemos encima y si, creo que si le tienes que explicar la ecuación matemática del final de tu artículo, porque seguro que es de letras... las que se van a cargar.Saludos.

Miguel A. dijo...

Que se quede con la intriga, jejej. Gracias por tus halagos. Siempre son bienvenidos.