lunes, 17 de agosto de 2015

Fiesta

Soy un antisocial y un aburrido. Me entran calculados ataques de agorafobia en lugares con demasiada gente y no disfruto de las muestras consensuadas de diversión que todo españolito cree universales. Además, viendo en cada telediario de cada día de cada verano, las fiestecitas populares o patronales de pueblos y ciudades de este nuestro país, a veces creo que lo de la mantilla y la pandereta no lo hemos superado. Somos paletos... lo somos, sin contemplaciones. Tenemos ese estigma de organizar fiestas con tufillo religioso y que encima roza el patetismo cuando lo mezclamos con petardos, ruidos, charanguitas y toros pillando por los huevos a tipejos hartos de alcohol que si pierden la vida es por carajotes...

Ea, ya me he quedado tranquilo. Como el toro que destripa a quien se pone por delante en cualquiera de las bonitas fiestas de nuestros pueblos.

Esas bonitas tradiciones...

No hay comentarios: