jueves, 29 de marzo de 2012

REWIND/PLAY


U
n silencio inexcusable como el que he mantenido durante los tres últimos meses da para tomarte las cosas de otra forma. Debo entonar el mea culpa de este vacío informativo que ha mantenido este blog desde el último día del pasado año, pero entre la desgana en que me había sumido tras unos meses un tanto delirantes y frustrantes a consecuencia de mis andanzas laborales, o ante la falta de ellas, y la desazón que me estaba provocando la situación política del país, no me atrevía a poner nada negro sobre blanco...

Esto ha cambiado porque en las últimas semanas han sucedido muchas cosas. Y todas ellas han sido felizmente analizadas desde todos los puntos de vista. No voy a ser yo menos, así que aquí va una especie de foto-fija de la situación en los últimos meses, un rewind/play de lo que hemos vivido y de lo que nos toca vivir...

El 'PPrato'
Las urnas lo dejaron claro. El PP tenía mayoría absoluta y a pesar de los iniciales cantos al consenso y al acuerdo (ya saben... "quiero ser el presidente de todos los españoles bla bla bla"), la derecha hace lo que quiere. Un 'PPrato' en toda regla. Innegable es que vivimos una etapa de recortes, siendo la reforma laboral (segunda en año y medio), el epítome de estos hachazos neoliberales, tanto que ha llegado a provocar una huelga a un Ejecutivo que apenas llevaba tres meses en el poder. ¿Exagerado por parte de los sindicatos? Puede. Yo en su lugar, hubiese azuzado más al personal con una huelga tras el verano. Seamos sinceros, habrá más desempleo y la gente estará más calentita. El resultado de este paro será el sabido: éxito indiscutible para las centrales sindicales; normalidad para el Gobierno. Todos ganan... y nosotros nos reímos de ambos.



Pero este Gobierno, presa como el anterior de esa cosa llamada mercados en primera instancia y también de lo que dicte Merkel, sigue incurriendo en el clamoroso error de resolver el embrollo del déficit condenando a la población a empobrecerse aún más. No caen nuestros dirigentes en que es más sencillo atajar el déficit apostando por el crecimiento. Si hay crecimiento, habrá más consumo. Si hay más consumo, mayor reactivación económica. Si hay más actividad economica, más flujo de crédito (de dinero, en román paladino). Si hay más dinero, más recursos para tapar agujeros. Pero no. No lo ven. Se pican con el déficit haciendo caso a los mandatos de Bruselas y amenazando a los españoles con más paro y una devaluación de la calidad de vida de todos que nos puede dejar en donde estábamos 30 años atrás.

La huelga strikes back
Yo no habría convocado una huelga para hoy. Ya lo he dicho antes. Quizás es precipitado, quizás la gente no esté por la labor, quizás nos hayamos aburguesado tanto que ya el mero hecho de ir a la huelga no tiene el simbolismo casi idílico de tiempos pretéritos. La lucha obrera ha cambiado y sus modos de pelear por mejores condiciones para todos también.



Lo que está clarinete es que el Gobierno popular no va a dar marcha atrás. La reforma ya está aprobada con la mayoría que los españoles concedieron a la derecha en noviembre pasado. Tienen derecho a hacerlo, pero también podrían haber escuchado el malestar de los españoles que no entienden como con la sangría de empleos que vivimos desde hace tres años y medios, seguimos emperrados en esa cosa llamada déficit y no en otras vías que puedan sacarnos del agujero.

No negaré que razones hay para la huelga, pero en un país en el que muchos hablan de "retocar" (eliminar) este derecho consagrado en esa cosa llamada Constitución, mal nos va a ir. No en vano, hoy es el día para los que tienen el derecho a manifestarse en huelga para que el resto del año tengamos ese derecho a trabajar del que ahora muchos carecemos, así que le pediría un poco de respeto constitucional a patronal y políticos de la derecha.

Despeñapeperos
Este y otras chanzas se han escuchado mucho desde el domingo pasado. Un PP que se las prometía muy felices en Andalucía y que, salvo sorpresón mayúsculo, se va a quedar en la bancada de la oposición cuatro años más. En Asturias, tampoco hubo buenas noticias, aunque puede que gobiernen con el archienemigo Cascos y el más que posible voto de UPyD, ese partido sin ideología pero que es de derechas, dirigido por la ínclita Rosa Díez.

Javier Arenas tiene que estar pensando qué debe hacer para ganar en Andalucía, una región que seguirá gobernada por el PSOE a pesar del desgaste orgánico e institucional, de los evidentes casos de corrupción y ante la palmaria desilusión de muchos andaluces. Pero el impactante ascenso de Izquierda Unida va a permitir a los socialistas seguir "pagando el alquiler" del Palacio de San Telmo.

Tiene ante sí un reto mayúsculo el PSOE andaluz. Griñán, convertido ahora en el único barón regional de los socialistas, puede hacer limpia dentro del partido, ganada ahora la posición a los 'chavistas' y a los 'rubalcanianos' (no, no son habitantes de planetas lejanos del universo Star trek). Difuminar el fantasma de la corrupción, dejarse tutelar por Valderas y compañía y evidenciar ante el resto de la España azul (gobernada en su mayoría por el PP), que hay otra vía -por la izquierda- para salir de la crisis, son sus grandes desafíos. Si cumple, Mariano Rajoy sabe que tendrá un pilar fuerte más abajo de Despeñaperros, ese límite donde el pasado domingo empezaron a estrellarse las ilusiones conservadoras de convertirse en dueña de toda España.

Créditos: revista-utopia.blogspot.com/youtube.es

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta tu manera de escribir y pensar, teniendo tu ideas politicas, como todos, intentas posicionarte desde un punto lo mas objetivo posible y eso me parece cojonudo la verdad. Solo hay una cosa que no estoy de acuerdo contigo y es triste, pero ojala la devaluacion de nuestra calidad de vida solo se "retrase" 30 años, yo soy de la idea que vamos a vivir peor que nuestros padres y no se si igual que nuestros abuelos... es jodido pero asi me parece. Saludos

Miguel A. dijo...

Gracias por tu comentario. Sí, probablemente me haya quedado corto en esa apreciación sobre nuestra calidad de vida, pero como este "partido" aún no ha acabado quizá en la prórroga perdamos aún más que esos 30 años. Y ahí vamos.